"Normalmente postergamos por ansiedad, miedo a hacerlo mal, falta de dominio en la situación, miedo a algo nuevo con resultados desconocidos, creer que no obtendré el resultado correcto”.

La Postergación o Procrastinación puede ser un acto de odio hacia ti mismo. Libérate del hábitos destructivos de no cumplir los compromisos que estableces contigo mismo. El incumplimiento de la promesas es una de las principales razones por la que muchas personas dejan de sentir aprecio por sí mismas. El hecho de no acabar lo que nos hemos propuesto destruye nuestro sentido del valor personal y afecta nuestra autoestima. Si mantienes este tipo de comportamientos, tu parte inconsciente comenzará a creer que no eres digno de nada.

Actuamos de una manera que se asocia con el modo en el que nos vemos a nosotros mismos.

Cuidado si postergamos nuestra vida, el amor, nuestras metas y la alegría de vivir.